MI HISTORIA

Soy argentina, de Villa Ballester, un pequeño barrio de Buenos Aires.

Desde pequeña me gusta bailar y todo lo que tenga que ver con el arte.

Crecí en una familia resiliente en la que la comunicación y mi mundo emocional significaron para mí, un desafío.

Me recuerdo y reconozco muy observadora, registradora innata de información. Literal como si siempre hubiera estado conectada a un canal que me estuviera traduciendo cosas que los adultos que me rodeaban no podían poner en palabras.

Durante mi infancia fuí la «niña buena» y cuando dejaba de cumplir con el mandato, me convertía en la niña mala.

Siempre fui muy sensible y aprendí a ir guardando esa sensibilidad al punto de disociarme en diferentes situaciones que me expusieron a aprendizajes muy profundos vinculados con la conexión con mi cuerpo y la autopercepción y valoración de mi misma.

En mi adolescencia me rebelé, sentí que todo aquello que yo deseaba requería de mi lucha. Esta lucha nunca estuvo fuera, estuvo siempre dentro, representada en mi núcleo familiar y en los vínculos más importantes de mi vida.

En el comienzo de mi adultez busqué hacer todo lo que me había creído que tenía que hacer para ser EXITOSA e irme, irme de ese núcleo que yo sentía era asfixiante y no me permitía vivir y ser en LIBERTAD.

Estudié en la Universidad Nacional de La Matanza la Licenciatura en Relaciones Públicas, trabajé desde mis 17 años para tener lo que para mí en ese momento significaba libertad: dinero.

14 años de trabajar en relación de dependencia me dió el ejercicio de probarme a mi misma la capacidad de autonomía y de desarrollo que tenía dentro de cada organización. Siempre me destaqué por ser responsable, proactiva, con gran capacidad de aprendizaje y resolución. Los últimos siete años, antes de irme a vivir fuera de Argentina, trabajé en una institución bancaria en la que pensé iba a jubilarme, sin embargo, me di cuenta que ni el mejor sueldo ni la «buena» carrera en una institución reconocida me hacía feliz.

Fue la primera vez que me encontré con el vacío hecho sentir. Todo perdió sentido y empezó a pesar y hacerse cuerpo.

Tenía 28 años cuando entré en una crisis existencial acompañada de crisis emocionales. Me di cuenta que me había convertido en una máquina de trabajar y que no quería tener esa vida para mí. Vivía con mucho cortisol en mi cuerpo. Naturalicé el estrés hasta que colapsé.

Me sentí más enjaulada que nunca y luego de un intenso y breve trabajo personal, renuncié a ese trabajo con el deseo de «vivir diferente».

Yo quería ser dueña de mi tiempo, trabajar de algo que me apasione tanto como bailar y que dejara huella en el mundo. Eso, le dije a mi terapeuta cuando me hice cargo de lo que sentía en verdad. Estaba cansada de correr, esta vez quería ir a otro ritmo, al mío, al propio.

Cuando conecté con ese DESEO de vivir de otra forma, llegó la oportunidad de vivir en México. No busqué emigrar, fue algo que la vida puso en mi camino como oportunidad. Allí me formé como Coach de Liderazgo consciente y me certifiqué en una herramienta de coaching llamada Points of You®. El coaching me dió herramientas de encuadre para mi vida y una forma diferente de VERME. Me dió la importancia de la COHERENCIA y la guía de mis VALORES, como ejes fundamentales para iniciar mi búsqueda, mi camino, hacia mi propio liderazgo. Y me dió lo que buscaba: la posibilidad de ayudar a otr@s e impactar en sus vidas.

Me regaló el poder de la pregunta y fue la puerta de entrada al mundo del desarrollo personal.

Paso a paso fui creando mi propia síntesis.

Estudié arteterapia e hice mis prácticas en una casa hogar con niñas víctimas de violencia de todo tipo. Encontré en este diplomado una herramienta importante para trabajar las emociones más allá de las palabras y con un profundo trabajo interno que permitió conectar con la fuerza creadora que somos y mi creatividad a la hora de transformar.

También me formé como Maestra de Reiki y en esta práctica encontré las creencias que más me identificaban a la hora de observar y creer en la vida. Encontré SENTIDO a todo lo que había vivido. Conecté con la capacidad que tod@s tenemos de sanar(nos). La capacidad de conectar con nuestra energía y nuestros cuerpos sutiles. La palabra contribución cobró para mi un sentido aún más fuerte.

Los planos superiores, la intuición, la sabiduría, la propia información, fueron parte de un camino de exploración y consciencia que fui desarrollando a lo largo de los últimos 7 años.

México para mí significó un despertar. Me puso en conexión con mi energía femenina, con diferentes maestras y madres que me maternaron, me apapacharon y me ayudaron a conectar con mi sabiduría, mi intuición, la tierra, lo orgánico y MI PROPIA MAGIA.

No fue casual que en México me convertí en mamá.

La maternidad era una de las cosas que no tenían espacio en la vida que decidí SOLTAR. Mi maternidad, la que yo deseaba, era posible en esta nueva realidad y vino a traerme mayor CONEXIÓN, desafíos, aprendizajes y trabajo personal.

Adentrarme en el mundo maternidad me dió dirección. Me atravesó por completo y vino a profundizar el trabajo personal que ya estaba haciendo, para llevarme a un siguiente nivel. Todo esto mientras en el mundo había una pandemia.

Luego decidimos movernos a Madrid.

Allí me formé en Counselling Humanista Integrativo durante el primer año de mi llegada. Encontrar este enfoque para mi significó terminar de encuadrar mi forma de acompañar. Encontré lo que fui a buscar: confirmar con el cuerpo que EL AMOR CURA.

Cada formación que tomé no se basa en teoría nada más, tiene como eje importante para mi, lo vivencial; yo viví cada proceso de cada técnica y formación que aprendí en todos estos años. La formal y la informal lo llevo puesto, soy mi mejor caso de éxito de las herramientas que transmito y practico.

Actualmente me encuentro en Argentina. Viví 6 años en el exterior de mi país y volví. La reconexión con mi origen significó otro viaje que aún sigo procesando.

Hasta el momento me volví experta en crear hogares y habitarlos.

Me especializo en acompañamientos de trabajo emocional para el reconocimiento del SER y ayudo a las personas a trascender sus miedos para hacer eso que vinieron a Ser.

En cada grupo, acompañamiento y sesión, pongo a disposición todas mis herramientas y habilidades para contribuir a la verdadera transformación que puede significar tu vida.

Mi historia tiene mil detalles, aprendizajes, muchas herramientas y enormes maestras que me han ayudado a llegar a este presente.

Todo eso que hoy es sabiduría lo comparto contigo para que conozcas el abanico de posibilidades que tienes y te inspire a encontrarte con aquello que viniste a vivir.

Para mí todo tiene un propósito de ser y es importante conectar con ello para Ser lo que vinimos a hacer.

Si resuenas, me encantará conectar contigo.